MOVIMIENTO "GRASSROOTS"

LA UNIDAD DE LA GENTE BUENA PARA 2016
Por Hecmilio Galván

Del partido nacional de los pendejos a la unión de los que queremos patria

“La unidad de la gente buena” es la consigna con que proponemos el proyecto político en que pensamos trabajar (junto a todos/as los/as que quieran) por los próximos cuatro años, para lograr un único objetivo:

Colocar en puestos del Congreso y los Ayuntamientos a verdaderos líderes sociales, profesionales, productivos, comunitarios, intelectuales, gremiales y populares e iniciar así la acumulación de Poder que se requiere para lograr los cambios sociales que la República Dominicana necesita.


La unidad de la gente buena es una propuesta sencilla, que no pretende excederse en sus aspiraciones, ni tampoco “fundir” de la noche a la mañana los sectores que la componen en una sola pieza. No se planteará como un partido político o un frente, sino más bien como un acuerdo, como una alianza táctica entre sectores sociales, económicos, políticos y culturales para dar un salto adelante.

Estoy convencido que este proceso que sugerimos, no es El Gran Proceso de Cambio por el que lucho, pero sí forma parte de él, al significar un paso de avance en la acumulación política de fuerzas para el cambio del país.

¿Quienes podrán participar?
Todos aquellos y aquellas que quieran construir un futuro distinto para el país.

No importa que hayas sido o seas parte ahora de un partido tradicional o no, o si vas a votar por ellos en esta ocasión. Lo esencial es que puedas asumir un compromiso de futuro con lo nuevo.

¿Es el objetivo ocupar cargos públicos?
Probablemente para algunos sí; pero para nosotros es un medio para impulsar ideas, proyectos, reconstruir la confianza social y la esperanza de poder.

¿A través de cual partido llevaremos candidaturas?
La idea es apoyarnos en los partidos y movimientos creados en el país a nivel nacional, si éstos están de acuerdo. Eso incluye los cuatro partidos que llevan candidaturas a estas elecciones (ALPAIS, Frente Amplio, DxC y APD y los que los apoyan como Corriente Febrerista, FR, etc), pero también a todos aquellos que no lleven candidaturas en este momento (AR, MC, Patria Para Todos, Partido Bochista, FEPAV, Autoconvocados, La Multitud, etc., etc.), y también aquellos que sean creados posteriormente.

Claro, lo más importante será integrar gente nueva, representantes de iglesias, de sindicatos, de academias, de sectores productivos, líderes naturales que estén dispuestos/as y tengan posibilidades.

¿Sería un compromiso vinculante?
Sí y no. La idea es que quienes asuman el compromiso puedan acordar un “Consenso de mínimos” para avanzar, pero cada partido o grupo conservaría su identidad, organización, liderazgo, estructura e independencia de criterios y de acción.

No habrá dirección central ni mayorías aplastante. Habrá puntos de encuentro, avenencias y compromiso puntuales y específicos.

Cada organización puede desarrollar su agenda paralela y mantendría sus posiciones políticas y programáticas.

¿En qué se diferencia este proyecto de los proyectos de unidad anteriores?
Muy sencillo. Aunque pueden ser muchas, dependiendo como nos desenvolvamos, la principal es que vamos a comenzar a trabajar cuatro años antes de las elecciones, eso es tiempo suficiente para decantar, sumar, acumular y, sobre todo, lograr compromisos importantes.

¿Es este un proyecto coyuntural?
Sí y no. Es un proyecto a largo plazo, que forma parte de un proyecto de cambio más amplio en el país, pero que sólo pretende contribuir a él y que se debe proyectar en cada coyuntura. Será un paso más en ese camino, y por ahora se plantea como compromiso para el 2016.

¿Quiénes serán la base fundamental del proyecto?
Todas las personas buenas del país, quienes trabajan honradamente y están cansadas del derrotero por el que nos conducen, incluyendo sus mejores organizaciones sociales, económicas, académicas, culturales y políticas.

Particularmente pienso que la base fundamental y los protagonistas de este paso deberán ser: los/as jóvenes, los/as productores/as nacionales, los/as dirigentes populares y comunitarios/as, los/as intelectuales, los/as ambientalistas, las organizaciones de base, etc., que deberán tener todas representación.

¿Cómo se concretizará la unidad?
Como un acuerdo firmado por todos los participantes, donde los involucrados se comprometan a ceder y a aceptar. En una provincia determinada un municipio apoyará a uno y en otro municipio le devolverá el apoyo.

¿Cuál será el punto de partida para el Consenso mínimo?
La ruptura con la partidocracia dominicana y la superación del modelo socioeconómico actual que funciona en detrimento de los sectores nacionales más desposeídos y deprime la industria y agricultura nacional.

¿Será el proyecto 100% exitoso?
Evidentemente que no. Apenas será un inicio para acumular Poder Político. Fracasará en algunos lugares y se cumplirá parcialmente en otros. Pero será un inicio y los inicios siempre son así.

¿Habrá problema y fricciones?
Evidentemente que si, la madurez tendrá que imponerse y evitar cualquier rompimiento del pacto. Habrá competencia y muchos errores, pero esperamos superarlos. El pacto será de carácter concreto y coyuntural. Se decidirá en 2016 si se mantiene el acuerdo.

¿Qué pasa si los partidos que no quisieron o pudieron unirse ahora, también se nieguen a unirse para 2016?
La responsabilidad de unirse o no, dependerá de cada sector, partido o movimiento. Esta unidad se dará con quienes estemos dispuestos/as, ni uno más.

Ahora bien, sino aparece alguien con registro electoral dispuesto/a, tenemos también tiempo para lograrlo. Habrá que pensar en otros caminos y pronto.

¿Tenemos los recursos para lograr los objetivos?
Definitivamente creo que sí, que tenemos muchos recursos dispersos, pero sobre todo mucha capacidad de trabajo y recursos humanos para compensar la evidente diferencia con la Partidocracia.

¿Cuál será nuestra relación con la partidocracia?
Una que nos permita entender que de sus bases saldrá también una parte del ejército que hará el cambio en RD.

¿Cuándo debemos comenzar?
Ya